Otra vez es viernes.
Pero no un viernes cualquiera no!
es un viernes dicharachero, enfático, protagonista.
Vamos, un viernes de los que pueden pasar a la historia
un viernes de los que salen en las revistas.

Este viernes no hay cháchara ni tertulia
Hoy tocan esas otras cosas del cojín
hoy tocan cervezas, orejas y rabo en pepitoria.

Hoy no he conseguido casi nada rimar
por un lado estoy triste pues no hay quintín
por otro contento, ¡nos vamos al Sabinar!

Otra vez es viernes

Fdo: Me voy echando leches

Otra vez es viernes y otra vez es el quintín.

Tal vez este sea otro fin de semana distinto, o tal vez no.

Solo tenemos que sentarnos a esperar que un nuevo sol aparezca por la plaza y que las sombrillas perforen el esfuerzo de una gran afición a los nenúfares.

Es etéreo y expontáneo. Acabo de encontrar dos esdrújulas dictonguicas. ¡que me meo!

Que bonito es el amor si se sabe utilizar y que bonitas son las noches inolvidables que nos brindas... chaval.

Aquí me hayo, aquí me encuentro la virgen maría y el malo del cuento.

Que feo es el amor cuando no se sabe utilizar.

Otra vez es viernes y otra vez es el quintín.

Fdo: Hoy no me he tomao la pastilla